LA COSTUMBRE
Dicen los materialistas que, el Hombre es un animal de costumbres, pues bien, analicemos la palabra primero. Entonces costumbre significa los hábitos que se adquieren cuando repetimos una y otra vez los actos análogos, en la práctica continua adquiere fuerza de ley y ese conjunto de cualidades o inclinaciones e usos forman parte del carácter distintivo de una persona o de una nación, no es más que, la conducta y los principios morales, buenos o malos, relacionado básicamente a la etnología y hechos usuales e instintivos correlativos a la moral en el orden de ideas, dando paso a la ciencia de las creencias morales, admitidas e históricamente determinables. Las costumbres se tratan solo de conductas, acciones y no de juicios o de ideas, tan diferente a la historia de las costumbres y la historia de las creencias morales. Ahora bien, las buenas costumbres implican una moral aprobada socialmente por apegarse a la ley.
Nuestro cerebro está dotado para la atención a los hechos nuevos y en el banco de memoria se van acumulando los hechos pasados que, poco a poco, se instalan en el lado oscuro de la mente, algo no fácil de recordar, es decir, en la parte consciente está en Luz y es lo que recientemente aprendemos y/o recordamos sin dificultad, la parte medio consciente, está a media luz, algo así como el atardecer, o el amanecer, es aquello que no es tan fácil de recordar, pero algo recordamos y la parte inconciente está en oscuridad, es todo aquello que ya no recordamos y se requiere de un gran esfuerzo para traer ese conocimiento a la conciencia; ese es pues a grandes razgos el plano de la mente, no obstante, de todos los recuerdos, algunos los reutilizamos en la conciencia o luz de la mente y siempre están presentes, ello es costumbre. Hay costumbres reñidas contra las leyes y son proscriptas y hay costumbres que, respetan el orden social establecido a las cuales llamamos las buenas costumbres sociales.
Si tenemos nuestra "lata con ruedas" o "La Nave" me refiero al automóvil pues, entonces, si por equis razón, ya no lo tenemos, entonces ese cambio brusco, nos altera, porque iniciaremos otra costumbre, la de no tener la movilidad que, hoy en día ya no es un lujo, es en verdad una necesidad, porque nos brinda transporte privado, íntimo, comodidad y mejora el tiempo que agotamos al dirigirnos al objetivo, pero tampoco significa y por más acostumbrados a que estemos, que debemos dejar un amor verdadero, solo por causa de una lata "con ruedas", digo así, despectivamente, porque como dijo el músico Carlos Santana, estoy consciente de que, valgo más que mi casa, mi automóvil, mi cuenta bancaria, es decir, nosotros y el amor verdadero valemos más que todo lo que nos de este mundo.
Yo me acostumbré a tí amor, cada día, cada momento, era como la sangre en mis venas, como el latir de mi corazón, te volviste una necesidad, como el respirar y cuando es así, uno se acostumbra y al romperse la misma, es decir, al dejar de abordarte, de estar contigo, ese cambió brusco e inesperado, me dejó inquieto, preocupado, mi mente, por poco pierde el control, no obstante tuve que tranquilizarme, analizar la situación, las causas y el por qué ocurrió lo inesperado, dejar de verte, de sentirte, de estar junto a tí, evidentemente, la mente se altera, cuando se "rompe" una costumbre, es que, las costumbres nos aquietan, es como entrar en reposo, porque dejamos de poner nuestra atención a hechos nuevos y recientes que podrían ser agradables o desagradables y ocupan la mente, la cual está preparada y diseñada para ello, es decir, para aprender día a día, algo nuevo, entonces, conforme aprendemos, nuestra atención está fija en lo nuevo y reciente, ello elimina el aburrimiento, el estrés, el cansancio mental y lo aprendido, poco a poco va pasando primero al lado medio oscuro o medio consciente de la mente y luego al lado oscuro de la mente, al banco de memoria, donde casi se olvida todo y cuesta recordar. Siempre todo aquello que es un conocimiento nuevo, estimula la mente que gusta de aprender y aquello que le place, lo recuerda y trata de no olvidarlo y así se hace costumbre, por lo tanto, el amor, amar, se convierte en una costumbre y si la costumbre nos cansa, nos estresa, nos aburre, el siempre lo mismo ya no nos place, entonces, se dice que, el amor se fue, ya no se siente igual, ya no hay nuevas sensaciones y finalmente ya no es agradable estar al lado de la pareja, para terminar separándose, porque no buscamos amar si no al "Dios Placer" que, basa su poder en los cambios de estímulos, por tal razón, está en busca de algo nuevo y diferente.
Cuando no conocemos el verdadero amor y además nuestro Dios es el "Dios Placer", acurre así, se convierte en una costumbre, la relación que agota todas su vertientes del placer y termina por desagradarnos, ya no nos gusta, así es el placer, se agota, se cansa y muchas veces vuelve por más y se vuelve a agotar, asta que ya no nos place, porque solo es placer y nada más, como que hace falta algo más y a veces no se sabe qué es, entonces analicemos:
Debido a que poseemos un Cuerpo Físico o Espíritu de Energía de Átomos, o Templo, donde está nuestro Espíritu Santo de Luz y Verbo Amor, luego, este Espíritu Santo, solo se complace con lo que le pertenece, es decir, la Luz, el Conocimiento, la Sabiduría, las Normas y Leyes Espirituales, por tal razón, su alimento no es el placer físico si no los hechos y el conocimiento espiritual, por tal razón, las costumbres y placeres del cuerpo físico le son ajenas, solo lo espiritual nutre, alimenta y da gozo, más que el placer, al Espíritu Santo, a nuestra Consciencia, luego, en casos así, hay un verdadero amor, con respeto a la pareja y a las leyes, normas y buenas costumbres familiares y sociales, no solo se busca al "Dios Placer", si no algo más, los valores espirituales más un verdadero amor y sentimiento hacia la pareja, no se trata solo de buscar Placer y nada más, no somos seres irracionales que actúan solo por instintos y el "Dios Placer" de las leyes naturales los manipula, claro, poseemos instintos al igual que los animales irracionales, pero, estamos además, dotados de un cerebro inteligente que, es capaz de entablar comunicación con el Espíritu Santo de Luz y Verbo Amor que, a su vez está unido a Dios, entonces, esa es la diferencia entre los que, queremos amar de verdad y conocemos el verdadero amor, diferencia digo, con gente que solo atina y buscar a su "Dios Placer" y cuando no hay amor, entonces ya sabemos, el Placer se agota, de tanto placer y placer llega un momento que, ya no hay nada nuevo, ninguna sensación que atraiga y finalmente rechaza, luego, es en ese momento en que, surge la idea de separación y la mente busca alguna novedad, algo nuevo, un distinto cuerpo y que le de placer que le estimule, porque solo busca al "Dios Placer" y no conoce el verdadero amor, no es capaz de obedecer a Dios y sus leyes y tampoco obedecer la ley mundial o Derechos Humanos, el nuevo orden social establecido en todo el mundo, porque cuando aprendemos a amar, obedecemos a Dios porque le amamos y si no creemos en Dios por lo menos obedecemos los Derechos Humanos, porque amamos el orden social establecido por las mayorías mundiales consecuentemente, al obedecer aprendemos a amar, porque no se obedece a lo que no se ama, esa rebeldía es contraria al amor, entonces si amamos lo justo, lo verdadero, está bien, es amor verdadero y si amamos a Dios y su ley, obedecemos sus leyes y si Dios manda tener sexo solo dentro del matrimonio, entonces debemos casarnos antes de tener sexo, ello es amor, primero amor a Dios y luego amor a la pareja, consecuentemente, así sabremos amar a la pareja, porque aprendimos a amar al obedecer a quien amamos, es más, no creo que a ninguna pareja le guste o quiera que, su pareja adultere por fornicación y si la amamos seremos fieles, consecuentemente, ser fiel es amar y obedecer las leyes, las buenas costumbres sociales y normas.
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